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  El Cuento de Lupin
 

El Cuento de Lupin

Esta es una Historia Real. Le paso a mi amigo. Antes que nada, quisiera disculparme porque mi estilo en la redacción no es tan bueno como el de mi amigo,  por lo que podría parecer que lo que cuento en realidad no es gran cosa, pero tiene gran valor sentimental para mi amigo.

 La verdad, no es que todo haya empezado el Sábado, aunque me parece bien comenzar la historia así. Era el Cumpleaños Numero Quince de mi amiga y compañera Jessica y yo no podía dejar de asistir. Con su insistente puntualidad, logro llegar cinco minutos antes de las 22:00, apertura de la fiesta. Al poco rato llegaron tres chicas. Ivana, a quien él había  conocido el año anterior, su sobrina, Camila (se llevaban solo un año de diferencia) a quien nunca había visto y La chica de sus sueños.

Entretenidas como estaban los dos ultimas tratando de espiar El Misterioso Libro Mágico de las Quince Velas de la Quinceañera, que entregaría el algún momento dado, mi desafortunado Compañero de Armas se puso a conversar con Camila sobre temas triviales. Mas tarde llegaron otros compañeros del Colegio, como Matías Bustamante, Lautaro, Vico, Blanquito con su hermano, Melissa, Tamara, Karina, Daiana , Rosita, El Ñeri, Zenteno, Castillo, Pino, Marín, y sus tres grandes amigos: Fernando Arispe, Mauro El Nono D’Agostino y Javier Cancio. Era, sin embargo, una lastima que El Guasón y Eseve no hayan querido asistir dada su aversión a este tipo de fiestas.

  Mientras esperaban la Gran llegada de Jess, iban picando un poco de esto y aquello, y los mas audaces (por no decir todos menos mi Amigo y Arispe) ya tomaban Cerveza. El truco de alimentarlos primero de Snack ’s  funciono bien, ya que no había mucha hambre cuando llego el Asado, el Pollo y los Chorizos. Fue entonces, cuando esta encantadora jovencita que estaba sentada en la misma mesa que mi Desventurado Compañero se lo propuso. Una venganza, contra Javier Cancio.

 He aquí un alto en mi historia. Mi Joven amigo había conocido a esta Chica, Araceli, mejor conocida como Aramy, el año pasado. ¿Cómo pudo caer en las redes de un amor imposible y sin sentido? Fue inconsciente. Durante la primer semana de clases, El apenas se había fijado en ella, preocupado como todos los demás por la Exigencia Académica del Nuevo colegio, ya que casi toda la División cursaba por primera Vez en esa Institución. Pero en una hora de Contra turno con ausencia de Profesora fue que la insistente Señorita exigía saber una y otra vez la hora. Despreocupadamente, el muchacho consentía su deseo. Hasta que ese comentario marco a fuego el Corazón del Chico. Por el simple echo de pedirle la hora reiteradamente, era mas que obvio para aquel imbecil obsoleto que la jovencita estaba profundamente enamorada de mi Amigo y así lo comento en general con palabras menos pomposas. Tratando de refutar esa declaración, mi amigo dirigió su mirada hacia aquel Patán, pero sus Ojos color Se te cruzaron con los Ojos Verdes de Aramy, y ahí mismo cualquier argumento negando el echo seria una blasfemia. Mi pobre amigo se había enamorado por ese malentendido, había empezado a prestarle atención, no porque creyera que las suposiciones del Falso Profeta fueran reales, sino porque le parecía que no había notado la existencia física de la Joven hasta ese comentario.

  Y aquí mi Amigo se vuelve algo pegajoso y empieza a seguir a la Joven a todas partes, en el trayecto del Colectivo a su hogar, esperándola en Contra turno para hacerle compañía al faltar la Profesora, haciendo los trabajos junto a ella en la Biblioteca, emprendiendo locas carreras en bicicleta hacia el Colegio solo para verla salir (Por poco y termina bajo las ruedas de un camión en una ocasión, pero así como mi Amigo tiene esa rara cualidad de Atraer todo tipo de problemas, también logra escapar airoso), y cosas por el estilo. Y luego viene a enterarse de que a la Joven le gustaba Matías De León, el carismático líder del Grupo. A partir de entonces, el Joven dejo de idolatrar a De León, al comprender que (cito a J.K.R.) era un carilindo inepto sin suficiente cerebro para llenar un dedal. A la larga, Aramy comprendió lo mismo. Y mi Compañero tuvo una ocasión para confesarle lo que era conocido por todos: lo que le pasaba con ella. Claro que ella ya lo sabia, así lo planeo mi amigo, con sus indirectas. Y no tuvo que confesarle nada, ella misma completo su frase en cuanto se armo de suficiente valor. Y ahí quedo, mi Amigo no pretendía nada, se auto despreciaba, pero la Joven no parecía querer cambiar la situación. Hubo un incidente aislado, en el cual la joven le declaraba su amor a través de un mensaje SMS. Mi joven amigo sospechaba que algo andaba mal y resulto ser que una amiga de Araceli había estado jugando con su celular y el corazón de mi Compañero. Otro incidente fue mas feliz. Faltaban tres horas para que el Grupo de Contra turno que integraba Aramy entrara de vuelta al Colegio, y mi querido amigo con su tarde libre, decidió hacerle compañía.

 Avellaneda Oulet Factory. Allí se dirigieron a dar mil y una Vueltas por los mismos pasillos, contándose cosas sobre su familia. El se compadeció aun mas de ella, y juro para si protegerla y hacerla feliz, por mas que sus sentimientos no coincidieran. El había encontrado por tercera vez en su vida a una persona tan sufrida como el. Pero por mas que la chica intentara salir con el, mi amigo se negaría. Su funesta relación anterior le había dejado mucho que desear de las Jóvenes. Y se declaro ante ella, y casi, casi la besa, pero por un segundo que no lo hace, y la deja marchar solitaria por Plaza Alsina hacia el Colegio.

 Y supuestamente, algo había fallado. La chica quería ser solo su amiga, pero había insinuado lo contrario, y el año escolar termino lleno de incertidumbres y promesas vacías. Mi joven compañero trato de llenar su vacío descargándose en sus proyectos Online y en los nuevos capítulos de su Historieta. Y al otro año, ¡OH, que terrible sorpresa, que el recibió con fingida indiferencia! La Joven había recursado. Y el castigo del Colegio era el cambio de Turno. Por suerte, existía la posibilidad de verla cuando sus contra turnos se cruzaran con sus curriculares., pero los sentimientos del Joven eran confusos. El la extrañaba, pero no estaba seguro de querer volver a verla. Y la joven esquivo cualquier posibilidad de cruzarse en los pasillos. Se sentía culpable. Ella lastimaba a todos sus novios y no quería hacerle lo mismo a mi Amigo, a quien le tenia cierto cariño, pero termino lastimándolo mas de la cuenta. La querida Ivana, que también había repetido, le enviaba los mensajes escritos de Araceli, quien tenia demasiado ¿miedo? para  presentarse ella misma. Se disculpaba en sus cartas, cuyo remitente respondía con entusiasmo, absolviéndola de todos los cargos. Pero aun insistía mi peculiar amigo. Quería una respuesta, un si o un no, para cerrar el asunto. Y el lastimero NO rotundo llego con la certeza de una flecha. Poco después, llego la invitación. Blanquito, Tamara, Melissa, Ivana, Araceli y el irían al cine, a ver Piratas del Caribe en el Fin del Mundo. Bonita experiencia, excelente película que desato el fanatismo de mi amigo por el Capitán Jack Sparrow y la tripulación del Perla Negra. Pero ni aun tras el film consiguió el preciado SI de la chica. Y toda posibilidad se esfumo.

 Ahora vamos al punto que me interesa. Antes de la vacaciones de invierno, Blanquito, secuaz de mi amigo, le otorgo información clave. Javier. A sabiendas, deliberadamente y completamente conciente en sus actos, había besado a Araceli. Las enfermizas vacaciones de mi amigo, llenas de venganzas y asesinatos mentales se salpicaban con las excusas online de Cancio. Pero mi amigo fue justo. Tanto Cancio como Aramy estaban en derecho de hacer lo que quisieran, ya que al fin y al cabo la chica lo había rechazado. Intentando subsanar los hechos, Cancio rechazo a la Joven, pero la brecha que se había abierto entre el y mi amigo no tenia arreglo. Claro que mi amigo siguió siendo amigo de ambos, pero ya no era lo mismo. Cancio estaba bastante sugestionado, y mi Compañero no ayudaba mucho cuando sus ojos color te brillaban con malicia al declarar “Cuídese Señor Cancio”. Por consiguiente, Cancio se ausento del Cumpleaños de Araceli, que mi amigo disfruto en su ausencia. Pero aun quedaba el Cumple de Jess...

 Mi Amigo tenia suficientes razones para que Aramy concretara su venganza, por lo que acepto. ¡Cuan rápido acepta el corazón enamorado! Cancio estaba en deuda con el y lo sabia. Costo pero al final logro convencerlo de Bailar con ella. El esperaba el momento, junto a Arispe, quien no bailaba (pese a que Tamy lo había intentado), mirábamos la entusiasta manera de bailar de Melissa y el Nono. Pero el momento paso y siguió de largo. ¿Cuál era el plan de Aramy? El salió afuera a reflexionar, pero al cabo llego la chica y lo saco a bailar. Su alegría duro una rato, hasta que... Ay, su corazón... El ya sabia que ella lo había utilizado para reconquistar a Cancio pero lo que vio... Arispe y el tenían sed. Fue a pedirle mas bebida a Tito, el cantinero, y los vio. Romántica y apasionadamente, en un rincón, besándose, acariciándose... Javier y Aramy...

 Fue suficiente. Salió al patio exterior, tras lo cual Castillo, Lautaro y el Ñeri le contaron experiencias similares, y el recordó que algo parecido había echo Cancio con Melissa a espaldas de Blanquito. Mi amigo, traicionado, estaba en estado de Shock. Araceli decidió aparecer. Sus ojos verdes se encontraron con los color te una vez mas, y, al final, tuvo que confesar. Una prenda. Lo ocurrido solo era una prenda, algo así como el Verdad Consecuencia. Si-dijo mi dolorido amigo-una prenda. Y fue a bailar con Tamara, Melissa y El Nono. Araceli se quedo, quieta, sola, en silencio...

 Por lo demás, las clásicas ceremonias de la Fiesta se llevaron con normalidad (o a la normalidad de alguien con siete fondos blancos de cerveza) y mi amigo compartió parte de una de las Quince Velas. Pero por lo demás, tanto Arispe como el no veían el momento de irse de la fiesta. Y mi amigo vio con placer el Remis lo devolvería a su hogar. Vi como, pegando sus ojos claros como el Te contra la ventanilla, se despedía de los pocos que habían quedado en el amanecer.

 Esa es la triste historia de mi amigo. No fue una fiesta divertida para el, al menos, pero Jessica estaba espléndida. Bueno, me retiro para poder terminar de leer el libro que me gane ayer por devolver  una valija muy grande de mi tía, “El Mundo según Larry”. Leo su triste historia, maldiciendo a Betagold por delatar a Josh, y lagrimas se desprenden de mis Ojos, color Te. 


 
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